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Debate en «El Café Comercial»

Ayer en «La Planta de Arriba», del magnífico salón del histórico Café Comercial, unas 70 personas nos reunimos para escuchar el debate sobre la novela Abadía y Mombiela. Dos familias, una historia. José Manuel Delgado de Luque presentó a Carlos Mora y a Manuel Campo Vidal. Autor y comunicador, «aragoneses ambos», se explayaron durante más de una hora sobre el contenido de la novela y las múltiples implicaciones sociales, políticas, históricas… y personales que ofrece Abadía y Mombiela. También parte del público intervino en el coloquio final. Para terminar, anunciamos la inminente publicación de la segunda novela de Carlos Mora, Un gran hombre, que será presentada en la Feria del Libro de Madrid y que continúa contándonos las andanzas detectivescas (y humanas) del que Campo Vidal calificó como un personaje especialmente interesante: Tomás Mombiela. 

Estas son algunas de las fotos que se tomaron ayer:

 

Manuel Campo Vidal, José Manuel Delgado y Carlos Mora

Manuel Campo Vidal, José Manuel Delgado y Carlos Mora

Manuel Campo Vidal y Carlos Mora

Manuel Campo Vidal y Carlos Mora

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Manuel Campo Vidal, José Manuel Delgado y Carlos Mora

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Café Comercial

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Firmando ejemplares de la novela

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Presentación de «Abadía y Mombiela. Dos familias, una historia»

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Medio centenar de personas asistieron ayer a la presentación de la novela Abadía y Mombiela. Dos familias, una historia en el impresionante salón de actos del Real  e Ilustre Colegio de Abogados de Zaragoza. Presididos por don Antonio Morán, Decano del Colegio (que abrió el acto con emotivas palabras sobre el autor y lo cerró felicitándose de que se pudieran celebrar en el colegio acontecimientos tan agradables como este) intervinieron: Pascual Aguelo, Presidente de la Subcomisión de Extranjería del Consejo Gral. de la Abogacía Española; José Manuel Delgado, Secretario General de la Fundación de Amigos de la Biblioteca Nacional; José María de la Torre (que reivindicó el papel del editor y la excelencia del libro en papel) y el autor, Carlos Mora. Pascual Aguelo dio la bienvenida al mundo de la literatura a Carlos Mora y  leyó significativos pasajes de la novela. José Manuel Delgado, como veterano editor, se felicitó de que se siguieran produciendo libros tan valiosos como el que se presentaba y, destacó que a pesar de ser una primera novela, el autor hubiera superado con gran éxito el desafío  de contarla en tercera persona. El autor recordó algunas anécdotas de su vida como estudiante en Zaragoza y llamó la atención sobre los principales valores que había pretendido en su obra… pero sin desvelar el desenlace de la misma, sugiriendo que quien quisiera saber más adquiriera el volumen. Cosa que se pudo hacer, y se hizo por casi todos los asistentes porque la acreditada Librería Fontibre había instalado a la entrada del colegio un puesto de venta.

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Antonio Morán y Carlos Mora.

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Pascual Aguelo

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José Manuel Delgado

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Carlos Mora y José María de la Torre

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Carlos Mora firmando

 

Dos familias y una historia

La revista Carta de España, del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, en el número 705 / Junio 2014 reseña el nuevo libro de Carlos Mora, Abadía y Mombiela. Dos familias, una historia:

Foto: Tony Magán  Revista «Carta de España»)

Foto: Tony Magán  Revista «Carta de España»

«[…] Como muchos escritores de hoy en día aprovecha la estructura de la novela policiaca para contar una historia que se ancla en la memoria de viejos rencores y silencios al socaire de la guerra civil. Dos familias enfrentadas desde antiguo y que pugnan por olvidar las dos Españas. […]
Abadía y Mombiela cuenta con un presentador de lujo; el veterano periodista y escritor Luis María Ansón que en el prólogo llega a decir, «…es un recreo para el buen gusto literario y desvela a un autor joven que ha despejado los horizontes parnmf02a una carrera sólida en el mundo de las letras» […]
La novela consta de veinte capítulos, dos de los cuales reflejan los crímenes de aquella contienda y, en el resto, se desarrolla la acción con el armazón de una novela negra y con el transfondo de olvidar aquellos horrores de la guerra y profundizar en la desaparición de las dos Españas y en que, cuando así lo deseen las familias, que los desaparecidos en cunetas y barrancos puedan, al fin, recibir el cariño y el calor de los suyos y de todos los hombres de buena voluntad que habitamos esta vieja piel de toro.»

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